Estamos a sólo nueve años de 2030, el año en que el mundo pretende haber conquistado los 17 Objetivos Globales y haberle puesto fin a la pobreza extrema. Sería un logro verdaderamente histórico, pero aún queda mucho por hacer antes de que estemos en camino de conseguirlo.

Sólo el último año (que se ha caracterizado por una pandemia mundial y la respuesta del mundo a la misma) ha demostrado lo importante que es realmente la misión de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, con un número cada vez mayor de personas orilladas a la pobreza, mientras que no se han priorizado las acciones urgentes necesarias para hacer frente a la crisis climática.

La derrota de la pobreza y la defensa del planeta son claves para un mundo más sostenible y equitativo. Un mundo en el que la atención sanitaria y la educación sean accesibles para todos; un mundo en el que las respuestas innovadoras a la escasez de alimentos y al cambio climático sean el centro de atención; un mundo en el que se escuchen todas las voces y nadie se quede atrás.

Si no actuamos inmediatamente, nos alejaremos aún más de crear este mundo para las generaciones futuras. El momento de actuar contra el cambio climático y de acabar con la pobreza extrema es ahora mismo. Una pandemia global sacudió el mundo en 2020, por lo que es crucial que dediquemos el 2021 para recuperarnos y empujar con más fuerza que nunca para acabar con la pobreza y hacer frente al cambio climático.

¿Por qué es tan importante en 2021 presionar para vencer la pobreza y defender el planeta?

Hay varias razones clave por las que ahora es el momento de impulsar el cambio en el mundo:

1. La pandemia ha hecho retroceder al mundo varios pasos en el camino hacia el cumplimiento de los Objetivos Globales de la ONU

Los avances en el alcance de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (17 objetivos que colaboran para acabar con la pobreza y sus causas sistémicas) ya estaban estancados antes de la pandemia mundial, pero el COVID-19 ha subrayado lo realmente atrasado que está el mundo y lo necesario que es tomar medidas urgentes, ya que la pandemia pone de manifiesto y potencia las desigualdades existentes.

Según el Informe sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2021 (Informe sobre los ODS), la tasa de pobreza extrema aumentó por primera vez en 20 años en 2020, y hasta 124 millones de personas volvieron a caer en la pobreza.

El informe señala cierto retroceso en cada uno de los Objetivos Mundiales. Entre ellos se encuentra el hecho de que el hambre en el mundo aumentó significativamente; los índices de violencia de género y de matrimonio infantil (que habían disminuido constantemente a lo largo de los años) van a aumentar debido al COVID-19; las desigualdades de ingresos se han agravado; y la desigualdad en la educación mundial está aumentando a un ritmo acelerado.

2. El mundo está experimentando su peor crisis de hambre en al menos cinco años

Los niveles de hambre y desnutrición no habían sido tan graves desde 2016, cuando el hambre aumentó por primera vez en una década debido a algunas de las peores sequías que el mundo había visto en años, así como a los conflictos en algunas regiones.

Los cierres y restricciones debidos a la pandemia provocaron pérdidas de ingresos para muchos, y esto ha afectado a la seguridad alimentaria de millones de personas. Los efectos de la pandemia no han hecho más que sumarse a la crisis de hambre que el mundo venía padeciendo antes del COVID-19, donde el impacto del cambio climático en la producción de alimentos y de los conflictos en el acceso a los mismos eran (y siguen siendo) las principales causas del hambre.

3. La crisis climática sólo empeora

Desde 2019, se ha producido un aumento de los desastres naturales relacionados con el clima y de los fenómenos meteorológicos extremos: sólo en las últimas semanas hemos visto incendios forestales en Canadá, Turquía y California, calor extremo en el noroeste del Pacífico y el sureste de Europa, e inundaciones en China, Alemania, Bélgica y Afganistán.

Como los científicos han advertido antes y siguen advirtiendo ahora, los fenómenos meteorológicos extremos sólo empeorarán y serán más frecuentes a menos que tomemos medidas inmediatamente para frenar el cambio climático.

Aunque la pandemia obligó temporalmente al mundo a ralentizar el ritmo, lo que provocó una disminución de las emisiones de carbono, 2020 sigue empatado con 2016 como el año más caluroso registrado, y aunque 2021 será más frío, se prevé que seguirá estando entre los 10 años más calurosos registrados.

Si las emisiones de gases de efecto invernadero siguen aumentando, el mundo no podrá alcanzar el objetivo de evitar un aumento de 1,5 grados centígrados en el calentamiento global, un objetivo establecido en el Acuerdo de París de 2015 con el fin de frenar la crisis climática. De hecho, si todo sigue igual el mundo se calentará más de 3 grados centígrados.

Cada grado extra de calor podría ser catastrófico y provocaría cambios meteorológicos extremos como olas de calor persistentes, lluvias intensas en determinadas zonas y tormentas gravemente destructivas. El calentamiento global continuado también provocaría cambios inimaginables en el mundo tal y como lo conocemos: aumento del nivel del mar que desplazaría a cientos de millones de personas de sus hogares; devastación absoluta de la vida marina; aumento de las crisis sanitarias; hambruna generalizada como consecuencia de un clima extremo que provocaría la pérdida de cosechas y ganado, y mucho más.

4. Millones de niños han abandonado la escuela y nunca volverán a ella

La pandemia hizo que 1.500 millones de niños se vieran afectados por el cierre de escuelas en todo el mundo y a principios de 2021 168 millones de niños no habían vuelto a clases, lo que supuso una importante pérdida en la educación. Según la ONU, 101 millones de niños habrán quedado por debajo del nivel mínimo de competencia lectora como consecuencia de la pandemia, anulando los logros alcanzados en materia de educación en las dos últimas décadas.

Según un informe de Save the Children, es posible que 10 millones de niños no vuelvan nunca a la escuela, lo que podría ser perjudicial para el desarrollo futuro de los países, ya que la educación es una inversión a largo plazo en la economía de un país. Si los niños no reciben educación, tienen menos probabilidades de contribuir significativamente a la economía de su país en el futuro, lo que supone un obstáculo más para acabar con la pobreza extrema.

Pero las escuelas son un apoyo vital para los niños en algo más que la educación, incluyendo, por ejemplo, programas de alimentación escolar que también aseguren que los niños puedan acceder a la alimentación diaria.

5. La pandemia ha intensificado las desigualdades en el mundo y ha sido devastadora para las comunidades marginadas

Las personas de color, las mujeres, los miembros de la comunidad LGBTQ+, las personas con discapacidades y los más pobres del mundo, entre otros grupos marginados, se han quedado atrás en los esfuerzos de desarrollo global, y están continuamente sometidos a cuestiones de desigualdad, justicia y discriminación. Como tales, las comunidades marginadas son las más susceptibles de sufrir la pobreza extrema, y la pandemia la ha exacerbado.

Las mujeres se han visto desproporcionadamente apartadas de la mano de obra como consecuencia de las repercusiones económicas del COVID-19, también están sufriendo un aumento de la violencia doméstica y cientos de miles de niñas corren el riesgo de contraer matrimonio infantil.

La comunidad LGBTQ+ sigue luchando por la igualdad de derechos y no ayuda el hecho de que la pandemia aumente la discriminación que sufren. Los agentes de policía de varios países han puesto en la mira a las personas LGBTQ+ con la excusa de imponer el distanciamiento social y las órdenes de permanecer en casa, y en Corea del Sur se ha llegado a acusar a las personas LGBTQ+ de propagar el coronavirus.

El mundo también fue testigo de un ajuste de cuentas con la desigualdad racial en 2020 tras la muerte de George Floyd, a manos de las fuerzas blancas del orden. Los ciudadanos se unieron como pocas veces se ha visto antes para exigir cuentas a los dirigentes, las empresas, las instituciones y las comunidades por discriminar a los negros y reclamar el fin del racismo sistemático.

La necesidad de justicia para las personas de las comunidades marginadas nunca ha sido más clara y, gracias al poder del activismo en línea, las voces de los ciudadanos que exigen justicia nunca han sido más fuertes. Tenemos que garantizar que, a medida que el mundo avanza, nadie se quede atrás.

¿Por qué 2021 es el momento de hacer que un cambio real ocurra?

A raíz de la pandemia ha surgido una nueva determinación por parte de los líderes mundiales y de los ciudadanos para poner fin a las desigualdades del mundo, emprender acciones significativas contra el cambio climático y derrotar la pobreza de una vez por todas.

Ahora más que nunca se ha producido un crecimiento sin precedentes del activismo ciudadano, con una población cada vez más numerosa que reclama un cambio urgente, incluso sobre la crisis climática, la equidad racial y los impactos de la pobreza. Es indudable que la fuerza está en los números y cuantos más ciudadanos pidan el cambio, más cerca estaremos de él.

Se ha producido un aumento significativo de la pobreza, el hambre y el calentamiento global en los últimos años, más concretamente en 2020, y si no se toman medidas inmediatas el mundo no volverá a ponerse en marcha para vencer la pobreza y defender el planeta de una vez por todas.

Sin embargo, en 2021 tenemos un acceso increíble a la tecnología, los recursos, las habilidades y los conocimientos que podrían proporcionar respuestas innovadoras y aplicables a los problemas existentes en el mundo. Todo lo que se necesita es un liderazgo decidido, decisiones políticas defendidas y financiamiento para hacer realidad estos cambios urgentes.

Por ello, Global Citizen Live, una campaña mundial histórica que culminará con un concierto de 24 horas el cual tendrá lugar en septiembre, pretende unir a los ciudadanos de a pie, a los líderes mundiales, a los activistas, a los principales artistas y a otros para amplificar el llamado al cambio necesario.

¿Qué tiene que pasar para que el mundo vuelva a la normalidad?

El Informe de la ONU sobre los ODS señala que la colaboración es la respuesta. Los líderes mundiales, sus gobiernos, empresas, corporaciones e industrias deben utilizar sus planes de recuperación COVID-19 para abordar simultáneamente algunos de los problemas más urgentes del mundo, como comprometerse a reducir las emisiones de carbono, conservar los recursos naturales, crear oportunidades de empleo, avanzar en el acceso a la educación, reducir la desigualdad de ingresos y promover la igualdad de género.

Con la Cumbre de Sistemas Alimentarios de la ONU en septiembre, la Cumbre del G20 en octubre y la mayor conferencia mundial sobre el clima, la COP26, en noviembre, 2021 representa una oportunidad crucial para que los líderes mundiales aborden la pobreza, el hambre y el cambio climático. Antes de estos momentos globales clave, la campaña Global Citizen Live hará que los Global Citizens de todo el mundo alcen sus voces en un llamado unido a los líderes mundiales para que tomen medidas reales y decididas para impulsar el cambio.

¿Qué acciones pueden tomar los Global Citizens?

Puedes tomar acción con nosotros ahora para apoyar la campaña Global Citizen Live, que reúne a algunos de los artistas más influyentes del mundo, líderes globales, activistas, filántropos y Global Citizens en un esfuerzo conjunto para derrotar a la pobreza y defender el planeta, que culminará en un evento de transmisión global de 24 horas.

Algunas de las acciones que puedes llevar a cabo con nosotros son: exigir a los líderes mundiales que brinden acceso a las vacunas para todos, lo cual puedes hacer aquí; contarnos en un vídeo lo que significa para ti la buena alimentación, lo cual puedes hacer aquí para ayudar a influir en las conversaciones mundiales sobre los sistemas alimentarios; ayudar a garantizar que haya más mujeres representadas en Wikipedia aquí; y pedir a los líderes mundiales que firmen esta petición para que tomen medidas urgentes contra la crisis climática. Puedes encontrar muchas más acciones que puedes realizar ahora para apoyar la campaña aquí.

Puedes unirte a la campaña de Global Citizen Live para derrotar la pobreza y defender el planeta tomando acción aquí, y formar parte de un movimiento impulsado por ciudadanos de todo el mundo que están tomando acción junto con los gobiernos, las empresas y los filántropos para lograr el cambio.