Antes de mudarse a Lagos, Nigeria — uno de los estados más prósperos del continente africano — en 2015, Chioma Egbo recuerda cómo fue crecer en un barrio pobre del estado de Benue, donde no todas las familias tenían baño ni información suficiente sobre saneamiento.
“La mayoría de nosotros solíamos ir a los arbustos o entornos alejados de las viviendas para hacer nuestras necesidades”, cuenta Egbo, de 26 años, a Global Citizen.
Recuerda los olores desagradables que salían después de la lluvia porque la gente no tenía un lugar adecuado para ir al baño.
“No fue una experiencia agradable en absoluto”, dijo.
Después de terminar la escuela secundaria en 2011, Egbo fue a la universidad en la ciudad de Awka, Estado de Anambra. Cuando se graduó, la asignaron al Estado de Lagos para su servicio nacional juvenil, un programa obligatorio de un año que deben cumplir los jóvenes nigerianos para apoyar el desarrollo del país. Al final, Egbo se quedó en Lagos después de conseguir trabajo como responsable de desarrollo de negocios y adquisiciones en Petrogap Oil and Gas Limited.
Su familia logró salir del barrio donde creció, pero aún viven en Benue — y a Egbo le preocupa cómo la defecación al aire libre sigue afectando la salud de muchas personas en su comunidad. El año pasado, pidió a los gobernadores de Nigeria en los estados de Cross River, Benue y Ondo que ayuden al país a lograr el estatus de libre de defecación al aire libre, para tener la oportunidad de asistir al Global Citizen Festival: Mandela 100 en Johannesburgo, Sudáfrica, el 2 de diciembre de 2018.
Llegado diciembre, Egbo se sorprendió al enterarse de que Cross River State no solo había escuchado a miles de Global Citizens como ella, sino que realmente se comprometió a invertir en el tema con el objetivo de erradicar la defecación al aire libre de una vez por todas.
La defecación al aire libre, la práctica de ir al baño en campos, matorrales, bosques, cuerpos de agua o espacios abiertos, es muy común en todo Nigeria. Más de 892 millones de personas defecan al aire libre en todo el mundo, y en Nigeria, el 23.5% de la población lo hace así.

Nigeria es la mayor economía de África, depende mucho de la producción y venta de petróleo, pero la persona promedio no se beneficia de la riqueza del país, y el 70% de los nigerianos no tiene acceso a agua limpia ni saneamiento.
Cuando no tienes acceso a agua limpia ni saneamiento, arriesgas muchísimo: enfermedades potencialmente mortales, menos asistencia a la escuela, más días de trabajo perdidos, desnutrición y pobreza.

Las instalaciones de saneamiento separan de forma segura los desechos humanos del contacto humano, pero cuando la gente defeca al aire libre, los desechos quedan expuestos y vuelven a contaminar los alimentos y el agua. El uso de agua contaminada y las malas condiciones sanitarias provocan mayor riesgo de enfermedades transmitidas por el agua, como la diarrea, que causa la muerte de más de 70,000 niños menores de 5 años cada año en Nigeria. Según el Banco Mundial, uno de cada diez niños nigerianos pierde la vida antes de los 5 años en parte por la falta de acceso a agua limpia y saneamiento. La defecación al aire libre —que ocurre en todo el mundo, desde ciudades y barrios marginales hasta áreas rurales sin infraestructura ni recursos de saneamiento— pone especialmente en riesgo a mujeres y niñas que dependen de baños comunitarios inseguros en espacios públicos.

Cuando no tienes cubiertas necesidades básicas como el saneamiento, es difícil alcanzar tu máximo potencial y vivir con dignidad.
“Es totalmente indispensable para combatir la pobreza, promover la dignidad, la igualdad de género, la salud y la educación”, explicó Talia Fried, gerente global de políticas y relaciones gubernamentales en Global Citizen y líder de la campaña de agua, saneamiento e higiene de Global Citizen, sobre los efectos a largo plazo de la defecación al aire libre.
Nigeria siente la presión por abordar esta crisis. India actualmente tiene el mayor número de personas que defecan al aire libre, pero está muy cerca de lograr el estatus libre de defecación al aire libre (ODF) para octubre, lo que convertiría a Nigeria en el país con la cifra más alta.
De cara al Mandela 100, Egbo escribió un ensayo de casi 3,000 palabras dirigido a gobernadores de nueve estados de Nigeria, incluyendo Cross River y Ondo, para que inviertan en agua y saneamiento. También compartió tuits pidiendo a los gobernadores “que muestren su apoyo al saneamiento y así a una Nigeria sana y educada”, para resaltar lo urgente que es que el gobierno actúe ya.
Estas acciones forman parte de la campaña continua de Global Citizen, que cuenta con el apoyo de varias organizaciones y aliados locales, para presionar tanto al gobierno federal como al estatal de Nigeria y lograr inversión en saneamiento. En 2014, el Consejo Colaborativo de Abastecimiento de Agua y Saneamiento (WSSCC) pidió a Global Citizen que amplificara el trabajo que venía haciendo para ayudar a que grandes grupos de personas lograran mejores condiciones de saneamiento y adoptaran buenas prácticas de higiene en todo el mundo. Al año siguiente, las Naciones Unidas lanzaron los Objetivos Globales (ODS) y, como parte del plan global para acabar con la pobreza, el ODS 6 busca garantizar el acceso a saneamiento e higiene adecuado y equitativo para todos en 2030, alineándose con la meta del WSSCC.
El jefe Sylvester Oju, de Higigon Bayanu en Cross River, lidera reuniones con ancianos y el comité WASH, revisando con WASHCOMs el estado de saneamiento en la comunidad.
El jefe Sylvester Oju, de Higigon Bayanu en Cross River, lidera reuniones con ancianos y el comité WASH, revisando con WASHCOMs el estado de saneamiento en la comunidad.
WSSCC gestiona el único fondo global de saneamiento, a través del cual colabora con socios sobre el terreno como la organización benéfica United Purpose Nigeria. Utiliza un enfoque sostenible y centrado en las personas, aplicando métodos como el Saneamiento Total Liderado por la Comunidad (CLTS, por sus siglas en inglés). El CLTS aprovecha el liderazgo local para asegurar el acceso al saneamiento para todas las personas, incluidas las más marginadas y vulnerables, enfocándose en cambiar los hábitos de higiene de toda la comunidad y no solo en construir baños. El WSSCC subraya que si personas mayores, LGBTQ, personas con discapacidad, niñas o mujeres no tienen acceso a saneamiento, la comunidad nunca será libre de defecación al aire libre.
“Vemos que Global Citizen es muy bueno para movilizar su red, así que estos temas ganan visibilidad y la atención que necesitan”, dijo Emily Deschaine, jefa interina de alianzas del WSSCC.
Al usar Global Citizen como altavoz y a través de su trabajo de incidencia de alto nivel, los esfuerzos del WSSCC con una serie de socios de coalición llevaron al gobierno nigeriano a escuchar las necesidades de saneamiento del país, lo cual fue seguido por algunos logros.
Cuando Amina Mohammed, que ahora es la vicesecretaria general de las Naciones Unidas, era ministra de medio ambiente de Nigeria, tomó el escenario en el Global Citizen Festival 2016 en Nueva York para anunciar el compromiso de Nigeria de eliminar la defecación al aire libre en el país para 2025 o antes. Un año más tarde, en Central Park, Suleiman Adamu, ministro de recursos hídricos de Nigeria, subió al escenario en el Global Citizen Festival 2017 y se comprometió a empoderar a 5,5 millones de personas para que sean libres de defecación al aire libre para el año siguiente.
Para noviembre de 2018, ya era evidente que el gobierno nigeriano empezaba a tomarse aún más en serio la eliminación de la defecación al aire libre tras la propagación de enfermedades mortales como el cólera, que son comunes en zonas congestionadas con instalaciones de higiene deficientes. Como resultado, el presidente Muhammadu Buhari declaró el estado de emergencia en cuanto al suministro de agua, saneamiento e higiene en Nigeria.
Con la llegada de Mandela 100 ese diciembre, WSSCC vio la oportunidad de seguir impulsando al gobierno a nivel estatal junto con Global Citizen. Los gobernadores tienen la influencia política y financiera necesaria para lograrlo.
Egbo, quien nunca había realizado acción social antes, animó a sus amigos y familia a pedir a los gobernadores de los estados nigerianos que defendieran el saneamiento. Se sentía afortunada de que su calidad de vida había mejorado al mudarse a Lagos, y sabía que personas en Benue y en todo el país quizás nunca tuvieran esa oportunidad.
Antes de su actuación en Mandela 100, el músico Wizkid se movilizó en redes sociales para motivar a otros a luchar contra la defecación al aire libre.
#BeTheGeneration 🇳🇬 ⭕
— Wizkid (@wizkidayo) 24 de agosto de 2018
Egbo nunca imaginó que sus acciones serían parte de más de 150,000 acciones tomadas dentro de la campaña de agua y saneamiento en curso de Global Citizen.
Tras bambalinas, Okito Wedi, gerente global de políticas y asuntos gubernamentales en la oficina de Global Citizen en Sudáfrica, tuvo reuniones presenciales con los gobernadores de Cross River State y Ondo State. Fried también siguió trabajando con socios para abogar ante los gobiernos, lanzar acciones y recopilar cartas de apoyo de aliados clave —incluyendo a Kevin Rudd, ex primer ministro de Australia y actual presidente de Sanitation and Water For All; el ministro de recursos hídricos de Nigeria, Suleiman Adamu; y la música nigeriana DJ Cuppy. WSSCC trabajó con Adamu para escribir personalmente a los gobernadores y animarlos a comprometerse.
Cuando llegó el momento en el escenario de Mandela 100 de Cross River State, el gobierno de ese estado se comprometió a invertir $15 millones en los próximos cinco años en WASH.
“Lograr agua limpia y saneamiento requiere soluciones africanas”, dijo la Dra. Chimaobim Betta Edu, directora general de la Agencia de Atención Primaria de Salud de Cross River State, al público. “Así que, me da mucho gusto anunciar hoy que me comprometo a aportar $3 millones cada año durante los próximos cinco años, para un total de $15 millones para el saneamiento en Cross River State.”
Vista general del estadio FNB durante el Global Citizen Festival: Mandela 100, el 2 de dic. 2018 en Johannesburgo.
Vista general del estadio FNB durante el Global Citizen Festival: Mandela 100, el 2 de dic. 2018 en Johannesburgo.
“Lograr que los gobiernos hablen sobre residuos humanos y la defecación al aire libre no es fácil”, dijo Fried de Global Citizen. “Esto es el resultado de los esfuerzos de nuestras y nuestros socios que han trabajado en esto durante años.”
Cuando Egbo se enteró del compromiso meses después de haber tomado acción, no podía creer la noticia.
“Me siento tan feliz y orgullosa de mí misma”, confesó, aunque al final no ganó entradas para Mandela 100. “Cuando tomé las acciones, nunca imaginé que iban a tener este gran impacto. Siento que he contribuido positivamente a mi comunidad, a mi país.”
Sarah Ode es una de las mujeres que espera ver pronto los beneficios de las acciones de Egbo. Ode, de 52 años, vive en la Administración Local de Akpabuyo, en Cross River State. Es inspectora de salud ambiental del gobierno de Cross River State. En Akpabuyo, la defecación al aire libre es algo habitual y la mayoría de la gente no sabe que es peligrosa, contó Ode a Global Citizen.
Ha visto cómo las y los niños se enferman por enfermedades transmitidas por el agua en su comunidad porque la gente defeca en arroyos cercanos. Por eso, las madres no pueden dedicarse a sus actividades diarias, como vender sus productos, porque tienen que llevar a sus hijos e hijas enfermas al hospital, explicó Ode.
“Cross River State siempre ha sido conocido como un estado verde, incluso más verde”, dijo. “Esa clase de compromiso por parte del gobierno estatal realmente ayudará mucho a asegurar que el estado conserve ese estatus.”

Ode está deseando que el gobierno trabaje con líderes comunitarios para instalar letrinas, proveer agua potable y educar a quienes viven en Cross River. Confía en que la infraestructura y un entorno público más limpio harán que las personas sean más saludables y productivas. Las mujeres y la infancia, en especial, ya no tendrán que gastar todo su tiempo yendo a buscar agua, dice, y podrán trabajar o ir a la escuela.
Niños participan en reuniones comunitarias sobre saneamiento en la aldea Omale Bendi II, Cross River.
Niños participan en reuniones comunitarias sobre saneamiento en la aldea Omale Bendi II, Cross River.
Los fondos anunciados en Mandela 100 ayudarán a que las y los nigerianos reciban los recursos de saneamiento que necesitan gracias a programas que no solo proveen baños, sino que también impulsan la educación y el cambio de hábitos. Empoderar a una comunidad para que entienda la importancia del saneamiento, y construir planes para que puedan abogar por sí mismas en caso de desastre o crisis hídrica que destruya la infraestructura, es parte de la batalla.
La tradición cultural es uno de los grandes retos para cambiar los hábitos de saneamiento. Virginia Kamowa, experta técnica en gestión de higiene menstrual de WSSCC, contó a Global Citizen que en algunas comunidades de Nigeria, las mujeres no pueden usar el mismo baño que el suegro, lo que las lleva a salir a defecar al aire libre. Además, quienes pasan por comunidades donde no viven, también pueden defecar al aire libre, lo cual retrasa el avance.
Tras el anuncio de Mandela 100 por parte de Cross River State, la campeona de Global Citizen y actriz de Orange is the New Black y activista Uzo Aduba visitó Tudun-Wada, un asentamiento urbano en el Territorio de la Capital Federal. La organización Initiative for Education and Development (IDEE) había realizado una sesión de “triggering” unos días antes. El triggering es un método para empoderar comunidades a poner como prioridad y practicar buenas prácticas de saneamiento e higiene.
Las y los organizadores empiezan una sesión de triggering reuniendo a la gente del pueblo y les presenta una pila de desechos humanos junto con una porción de comida y agua. Las moscas suelen ir de un lado a otro entre los tres. Luego, quien organiza la actividad se acerca a una persona y le pregunta si todavía querría comer esa comida o beber esa agua después de ver eso. Este ejercicio muestra cómo, cuando una sola persona defeca al aire libre, la enfermedad se puede esparcir fácilmente y afectar a toda la comunidad. Así que las personas de la comunidad son motivadas a desarrollar planes de acción para limpiar su entorno, ya sea construyendo baños, promoviendo educación o haciendo encuestas para ver dónde están las necesidades.
Solo el 26.5% de la población en Nigeria utiliza fuentes mejoradas de agua potable e instalaciones de saneamiento, por eso siguen haciendo falta más fondos y recursos, ya sean de países donantes, el sector privado o de los gobiernos locales, para lograr el estatus de "libre de defecación al aire libre" para el 2025 o incluso antes.

Nigeria ya está mostrando más interés en resolver esta crisis a nivel estatal, lo cual es una señal positiva. En el evento de Global Citizen por el Día Mundial del Agua 2019 el 19 de marzo, en la capital, Abuya, el Estado de Cross River se comprometió a ser el primer estado en alcanzar el estatus ODF. En 2016, el 35% de la población de Cross River practicaba la defecación al aire libre —era la 13ª tasa más alta entre los 36 estados, según WSSCC. Cumplir este compromiso mejorará la vida de más de un millón de personas que actualmente se ven afectadas por la defecación al aire libre. Ese día, el ministro Suleiman también anunció que el estado había cumplido su compromiso anterior de empoderar a 5.5 millones de personas para que fueran libres de defecación al aire libre al siguiente año.

Después, el Estado de Ondo respondió al anuncio de Cross River y prometió que ellos sí serían el primer estado en Nigeria declarado libre de defecación al aire libre. En 2016, el 32% de la población de Ondo practicaba esta costumbre, la tasa número 17 entre los estados, justo después de Cross River.
Un par de meses después, en Global Citizen Live Berlin en mayo, Ondo asumió el reto. La Sra. Yetunde Adeyanju, directora ejecutiva de la Agencia de Protección Ambiental del Estado de Ondo, en nombre del Gobernador Oluwarotimi Odunayo Akeredolu, aseguró que Ondo lograría el estatus ODF para 2022. Este compromiso beneficiará a más de 1.1 millones de nigerianos que practican la defecación al aire libre en Ondo.

“Toma mi palabra: estamos comprometidos; Ondo está decidido a ser el primer estado libre de defecación al aire libre del país”, dijo Adeyanju.
El estado destinó un total de $27.77 millones de dólares americanos al presupuesto de agua, saneamiento e higiene entre 2020 y 2024, manteniendo así el presupuesto duplicado que entró en vigor este año. Después de anunciar que habían desbloqueado $2 millones de su compromiso de $3 millones para los fondos del WASH en 2019 como parte del compromiso Mandela 100 — el millón restante apoyará el cambio de comportamiento en saneamiento y las actividades de Promoción de Saneamiento e Higiene Rural en Nigeria (RUSHPIN).
El Estado de Cross River también sumó $5 millones de dólares americanos más en saneamiento para los próximos cinco años, con el objetivo de tener un Cross River más limpio y más verde. Un tercer estado nigeriano, Edo, comprometió $15 millones en tres años para eliminar la defecación al aire libre para el 2025 o incluso antes.
Bridget Achweng está junto a su letrina en la región de Cross River.
Bridget Achweng está junto a su letrina en la región de Cross River.
Con el apoyo de los Global Citizens y organizaciones aliadas, WSSCC planea seguir ayudando a Nigeria a alcanzar sus metas y asegurarse de que el gobierno libere los fondos prometidos. Los estados que ya han avanzado hacia el ODF son un ejemplo poderoso para el resto, según Fried.
“Sigue pidiendo a tus funcionarios del gobierno. Es clave seguir exigiendo cuentas al gobierno”, dijo Deschaine de WSSCC.
Las Global Citizens pueden seguir participando de muchas maneras, comentó Fried. Puedes continuar tomando acción, informar a tu familia y amistades sobre la importancia del agua limpia y el saneamiento, y animarles a actuar. También puedes apoyar a grupos locales u organizaciones que trabajan para garantizar que las personas que viven en pobreza accedan al agua limpia y al saneamiento, y seguir exigiendo a tus líderes que implementen y cumplan cambios de políticas para abordar estos problemas urgentes.
“Estos compromisos son súper alentadores y tienen el potencial de cambiar de verdad la vida de quienes viven en pobreza en Nigeria. Pero tenemos que exigirle cuentas a los responsables hasta que cumplan sus promesas”, dijo Fried. “Puedes contar con nuestro seguimiento y, cuando haga falta, los Global Citizens tomarán acción para que estas promesas se cumplan”.
Egbo ya tiene ideas para hacer crecer el movimiento en su comunidad. Su intención es seguir tomando acción a nivel local y espera hablar con líderes para intentar asignar fondos para la gestión adecuada de aguas residuales.
“En lo que está a mi alcance, yo puedo ayudar a Nigeria a lograr el estatus libre de defecación al aire libre, creando conciencia sobre los peligros de la defecación indiscriminada y cómo afecta negativamente nuestra salud y nuestro entorno”, dijo ella.
Aldeanos responden preguntas de un educador WASH en la región de Cross River.
Aldeanos responden preguntas de un educador WASH en la región de Cross River.