Por qué los Global Citizens deberían preocuparse
Más de 5 millones de mujeres, niños y adolescentes mueren cada año por enfermedades prevenibles en 50 países alrededor del mundo. El Global Financing Facility (GFF) se lanzó en 2015 como un programa para ayudar a ponerle fin a esas muertes. El 6 de noviembre, Noruega será copatrocinadora de la reposición del GFF con el objetivo de recaudar $2 mil millones en nuevas ayudas durante el período 2018-2023. Como Global Citizens, todos jugamos un papel crucial para garantizar que se cumpla esta meta. Puedes actuar y ayudar en esta causa aquí.


La lotería más grande de la vida es, sin lugar a dudas, el lugar en el que te tocó nacer.

Desde el momento en que llegas al mundo, ya hay mucho predeterminado: las tasas de alfabetización en tu país, el acceso a la atención médica, las tasas de desnutrición, cuál es la esperanza de vida o, peor aún, las posibilidades de mortalidad infantil.

Dónde o en qué familia nacemos está completamente fuera de nuestro control.

Sin embargo, lo que algunos de nosotros sí podemos controlar es cómo utilizamos nuestra posición de privilegio para ayudar a aquellos que nacen en comunidades y países mucho menos privilegiados.


La brecha entre quienes nacen con acceso a sistemas de atención médica de calidad y quienes nacen en un lugar donde los bebés no pueden vivir más de 5 años es significativa. De hecho, es una brecha que requiere $33.3 mil millones para cerrarla.

Y es aquí donde entra en juego Global Financing Facility (GFF). Lo que posiblemente sea el esfuerzo más grande del mundo para cerrar esa brecha y brindarle oportunidades a aquellos que necesitan tener una vida saludable, o incluso al menos sobrevivir durante sus primeros años de vida.


El GFF lejos de querer dictar qué es lo que deben hacer otros países, proporciona financiamiento flexible para que gobiernos e instituciones se empoderen a sí mismos. Este programa ayuda a través del trabajo preparatorio y proporciona la asistencia técnica necesaria para determinar las prioridades individuales que ayudarán a cada país a alcanzar sus metas específicas en el área de la salud.

Este trabajo significa, por ejemplo, eliminar cuellos de botella en los sistemas de atención de salud, recopilar datos y encontrar intervenciones rentables, pero sostenibles en términos de costo -beneficio. El GFF trabaja con los ministerios de finanzas y salud en los respectivos países para asignar recursos adicionales o existentes en donde más se necesiten, a menudo en el área de la atención de salud primaria.


En los estados del noreste de Nigeria, por ejemplo, la GFF trabajó con los gobiernos locales para restablecer servicios como el de brindar apoyo psicosocial, el de salud mental y el apoyo a la salud materna, neonatal e infantil y salud nutricional.

Otro ejemplo importante es el accionar de la GFF y cómo le permitió a Liberia invertir en atención de emergencia de calidad tanto en atención obstétrica y neonatal como en la salud de los adolescentes. El país también ha podido empoderar a su gente a través de la participación y la gestión de la comunidad, y ha establecido un registro civil para recopilar los datos de salud necesarios, como nacimientos y muertes, para poder medir su progreso.

El programa GFF comenzó en julio de 2015 en Addis Abeba, Etiopía, cuando el Grupo del Banco Mundial y las Naciones Unidas se reunieron con un objetivo: mejorar la salud materna en todo el mundo. Ayudar a las mujeres, niños y adolescentes es una prioridad porque saben que eso ayudará a mejorar su futuro.


El financiamiento de la GFF apoyaría a Every Woman Every Child, un compromiso internacional para mantener la salud y el bienestar de las mujeres, niños y adolescentes como centro de desarrollo. El plan era ayudar a los países en transición con ingresos bajos y medios a planificar inversiones sostenibles para mejorar la salud, la nutrición y el bienestar de las mujeres, los niños y los adolescentes.

Tres años después, la GFF ha alcanzado más de la mitad de sus objetivos en aquellos países receptores. Hasta el momento este sistema se ha implementado en 27 países, con Mali como la adición más reciente, que se unió en junio de 2018.

El objetivo ahora es apoyar a los 50 países que han solicitado unirse a la GFF antes de 2023. Después, el programa busca mejorar los elementos esenciales que muchas naciones desarrolladas dan por sentado: reducir la tasa de mortalidad materna mundial a menos de 70 por 100,000 nacimientos y reducir la tasa de niños menores de 5 años que mueren a 25 muertes por cada 1,000 personas para el 2030.

Detrás de este proyecto hay muchas partes interesadas incluidas las Naciones Unidas, la Organización Mundial de la Salud, Gavi, la Alianza de Vacuna y el Fondo Mundial para Combatir el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria. En términos de contribuyentes, el fondo fiduciario GFF está financiado por los gobiernos de Canadá, Noruega y el Reino Unido, además de la Fundación Bill & Melinda Gates y MSD para madres.

Muchas muertes maternas e infantiles son prevenibles. A veces, algo tan simple como brindar servicios de planificación familiar puede ayudar a las mujeres a espaciar los nacimientos y, por lo tanto, dar a luz a recién nacidos sanos. Estos recién nacidos, a su vez, tienen la oportunidad de crecer fuertes para convertirse en una generación de personas sanas, que iniciarán un ciclo de prosperidad para su comunidad y país.

Ayudar a que un país logre elevarse de tener ingresos bajos a medios comienza con el nacimiento de la población y la planificación familiar. Y cuando la pieza faltante es el financiamiento no hay nada que lo merezca más que un esfuerzo colectivo financiero internacional.

News

Combate la pobreza

GFF: Este es el plan global para que todos los niños tengan la oportunidad de tener una vida saludable

Por Diana DuongJana Sepehr  y  Erica Sánchez