Miles de niños no volverán a la escuela este septiembre porque han muerto en zonas de conflicto. Una nueva instalación en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York busca asegurarse de que no sean olvidados.
UNICEF colocó 3.758 mochilas en el jardín de la ONU que permanecerán hasta el 10 de septiembre y luego se entregarán a los niños necesitados. Es un mensaje antes de la Asamblea General de la ONU que comienza el 18 de septiembre, cuando los líderes mundiales se reunirán para discutir una variedad de asuntos internacionales.
"UNICEF desarrolló esta instalación para mostrar la magnitud de las muertes de niños en zonas de conflictos, y al hacerlo, exigir una mayor protección para esos niños en todo el mundo", dijo el subdirector de comunicación de UNICEF, Christopher de Bono, en un comunicado emitido a Global Citizen.
La instalación solo representa alrededor de un tercio de los 12,000 niños que, según los informes, murieron o resultaron heridos en 2018 en conflicto, la cifra más alta desde que la ONU comenzó a realizar un seguimiento.
La Asamblea General de este año marca el 30 aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño (UNCRC), dijo la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore, a través de un comunicado de prensa. La UNCRC es un tratado de derechos humanos que establece los derechos de los niños, y los gobiernos que firmaron el tratado deben informar sobre su progreso. Es por eso que Fores espera que la instalación ayude a que se hagan responsables.
3,758 school backpacks.
— UNICEF (@UNICEF) September 8, 2019
3,758 young lives lost to conflict.
As children in many parts of the world return to school, we’re calling on world leaders at #UNGA to protect #ChildrenUnderAttack. #ENDviolencepic.twitter.com/3BdOLIPTpK
Cuando las escuelas son emboscadas, los niños corren el riesgo de sufrir lesiones o incluso la muerte, además la infraestructura se destruye y los sistemas educativos se debilitan a largo plazo. Sin educación, los niños carecen de las habilidades que necesitan para hacer frente a la crisis y ayudar a reconstruir sus comunidades.
Fore se mantiene optimista y dice que el progreso realizado en los últimos 30 años es un testimonio de lo que se puede lograr en el futuro.
"Las mochilas de UNICEF siempre han sido un símbolo de esperanza y posibilidades para la infancia", dijo sobre la instalación.
La organización acepta donaciones para llenar las mochilas con los elementos básicos que los niños necesitan para tener éxito en la escuela, desde cuadernos hasta vacunas.
Pero garantizar que todos los niños tengan acceso a una educación de calidad requerirá que los gobiernos se comprometan con su seguridad, según de Bono.
"Sabemos que cuando los líderes mundiales se unen, se puede lograr el progreso, siempre que mantengamos a los niños en el centro de las decisiones tomadas en la ONU, y reunamos la voluntad política necesaria para poner fin a los conflictos y mantener a los niños a salvo", dijo.
"Los líderes mundiales deben hacer del mundo un lugar mejor para los niños atrapados en situaciones de conflicto".