¿Te sientes abrumado por todo lo que está pasando en el mundo? Te entendemos, pero también sabemos que quedarte de brazos cruzados solo garantiza que nada cambie. Por eso queremos darte algunas formas rápidas y efectivas para que tomes acción.
Muy seguido, quienes gritan más fuerte son los que marcan la agenda, así que es esencial asegurarte de que tu voz también se escuche. El activismo, la educación y la presión a nuestros legisladores son lo que garantiza que ellos rindan cuentas ante ti, la persona que los eligió. Sabemos que puede que estés estresado, pero justamente por eso ahora es el mejor momento para aprender cómo puedes lograr que tus representantes electos sepan qué temas importan más a la gente que representan.
Para empezar, aquí te contamos por qué llamar a tus miembros del Congreso es una de las maneras más efectivas de lograr un impacto.
¿Por qué molestarse en llamar?
Porque funciona. Mira, sabemos que levantar el teléfono no siempre es fácil. Pero ese pequeño esfuerzo extra es justo lo que hace que sea una de las mejores herramientas que tienes a la mano.
Cada llamada a una oficina del Congreso queda registrada, se cuenta y se informa. Si bien los correos, cartas y redes sociales pueden servir, cuando los legisladores reciben una ola de llamadas sobre un tema, de inmediato les prestan atención. Ellos vigilan estos números cuidadosamente porque saben que la opinión pública influye en sus posibilidades de ser reelectos.
Así de sencillo puedes hacerlo:
1. Busca sus números de teléfono. Por suerte, esto es súper fácil de hacer. Puedes encontrar los datos de contacto de tus representantes federales, estatales y locales en USA.gov, entra a 5 Calls, o llama directamente al conmutador del Capitolio al (202) 224-3121. Guarda los números (de oficina en DC y local) de tus dos Senadores y de tu Representante. Te ahorrará tiempo más adelante (¡y si también llamas a tu gobernador sobre asuntos estatales, puntos extra!). No pierdas tiempo llamando a otros legisladores, ellos realmente solo valoran la opinión de la gente de su propio distrito, así que céntrate en los tuyos.
2. Prepara lo que vas a decir. Hazlo simple, no tienes que complicarlo demasiado. Solo di tu nombre, dónde vives, por qué llamas y qué quieres que hagan al respecto. Aquí te dejamos un ejemplo de guión fácil para iniciar:
“Hola, mi nombre es [Tu Nombre], vivo en [Tu Ciudad, Código Postal].
Llamo al [Senador/Representante] para expresar mi [apoyo/oposición] sobre [tema específico o proyecto de ley].
Esto es importante para mí porque [explica brevemente tu motivo personal].
Le pido al [Senador/Representante] que tome acción [a favor/en contra] de esta medida. Gracias.”
3. ¡Llama y lee tu guión! Si contestan el buzón de voz, deja tu mensaje (igual lo registran). Si te atiende alguien de la oficina, sé amable, directo y ve al grano.
4. Repite todas las veces que sea necesario. Una llamada está genial, pero hacer llamadas frecuentes es mucho más efectivo, así que procura continuar. La presión constante y consistente es lo que realmente logra el cambio.
Algunos tips para sacarle el mayor provecho a tus llamadas
1. Llama sin importar en qué parte del debate esté tu representante, solo adapta tu mensaje según el caso. Si ya apoya tu postura, refuérzale lo importante que es para ti. Si está en contra, céntrate en valores compartidos y recuérdale que vas a tomar en cuenta su decisión en las elecciones.
2. Mantente enfocado. Sabemos que pasan muchas cosas, pero limítate a uno o dos temas por llamada. El personal registra cada tema por separado, así que procura ser conciso y evita enlistar todas tus molestias (aunque den ganas).
3. ¿No te gusta hablar por teléfono? Intenta llamar después del horario de oficina para dejar un mensaje de voz. Igual cuenta y así evitas hablar con una persona.
4. Sé constante. Puedes hacer que estas llamadas sean parte de tu rutina — solo te toma uno o dos minutos, así que busca un momento durante el día (¿quizá en vez de seguir scrolleando noticias tristes?).
5. ¡La presión de grupo puede ser buena! Comparte esta guía y anima a tus amigos y familiares a que llamen también. Un ciudadano puede ser fácil de ignorar, pero mientras más voces se levanten, más atención recibirán los temas que importan.
Llamar no es precisamente glamoroso, pero es una de las formas más sencillas y efectivas de influir en quienes tienen el poder (y aprovecha que de todas formas ya todos estamos pegados al teléfono). Así que agarra tu celular y empieza a hacer ruido, no pueden ignorarte.
Esta serie es parte del “Take Action Toolkit” de Global Citizen, donde compartimos trucos y consejos para elevar tu voz y lograr que se escuche sobre los temas que más te importan. ¡Échale un vistazo aquí!