Maryanne Gichanga llama a su empresa, AgriTech Analytics, “la amiga del agricultor”. Viendo la sonrisa que ilumina su rostro y su actitud emprendedora que motiva a todos a su alrededor, creemos que la descripción le queda perfecta a esta ganadora del premio Waislitz de Global Citizen y a la compañía que cofundó.
Alimentando al mundo, pero quedando atrás
Queremos ir un paso más allá. AgriTech Analytics no solo es “la amiga del agricultor”, en realidad es toda una campeona por ellos, y escuchar a Gichanga, la CEO de la empresa, hablar sobre la importancia de los pequeños agricultores lo demuestra.
“Es importante reconocer el enorme esfuerzo que ponen los pequeños productores. Si ellos se retiraran, simplemente no habría comida. Los han ignorado, aunque son la mayoría,” nos cuenta. “Mira, estos agricultores producen más del 80% de la comida que consumimos, pero son los que menos tienen. Casi nadie piensa en ellos de verdad. Incluso cuando la gente se reúne en grandes mesas o hay reuniones tipo COP, nunca hay un representante que sea pequeño productor.”
Esta es la base sobre la cual se construyó la empresa. El trabajo de Gichanga en AgriTech Analytics está completamente dedicado a los pequeños agricultores y a su compromiso de alimentar a nuestras sociedades. Esta start-up keniana fue creada para beneficiar a cada persona que siembra, come y alimenta dentro de su comunidad. El objetivo es aliviar el hambre empoderando a las granjas rurales y asegurando que los alimentos producidos sean saludables y nutritivos, mientras se ayuda a los agricultores y sus familias a lograr una vida más estable.
Gran parte de esto se logra al brindar a los agricultores de pequeña escala el conocimiento y las herramientas necesarias para mejorar su trabajo y adaptarse al impacto del cambio climático.
“Les ayudamos a transitar el camino dándoles toda la información que necesitan sobre agricultura,” explica Gichanga. “Estamos para decirles cuándo regar, o si hay demasiada agua. Les decimos que reduzcan el fertilizante o que ni siquiera es necesario. Les indicamos: ‘creo que ya es hora de quitar la maleza, o es momento de sembrar esto en su lugar.’”
La tecnología al servicio del campo
¿Y cómo logran adquirir ese conocimiento para proveer soluciones así? Gracias a intervenciones tecnológicas innovadoras. Gichanga continúa: “Hemos podido incorporar IoT y satélites para tener datos históricos y actuales, y así predecir cómo estará el clima en las siguientes tres semanas. También logramos entender cómo estaba una granja antes y analizar el estado de degradación del suelo.”
Además, la empresa utiliza sus propias soluciones de IA para entender aún más los retos a los que se enfrentan los agricultores, adaptando la inteligencia artificial a los problemas específicos de cada región y cultivo.
Maryanne Gichanga, ganadora del Waislitz Award de Global Citizen, trabaja con AgriTech Analytics para ayudar a pequeños agricultores con IA y capacitación centrada en las personas, buscando soluciones a sus problemas en el campo.
“Tenemos un equipo que se encarga de entrenar la IA. Entrenamos nuestros propios modelos porque queremos que sean lo más útiles posible para los agricultores con quienes trabajamos,” le contó a Global Citizen. “Hay muchísimos datos gratis por ahí, pero si solo conectas los datos libres que ya existen, probablemente no serán de nuestra región, así que las soluciones que recomiende la tecnología no van a funcionar de verdad para estos agricultores. Por eso entrenamos nuestra propia inteligencia artificial.”
Mira, estos agricultores producen más del 80% de la comida que consumimos, pero son los que menos tienen.
De hija de agricultores a innovadora en AgriTech
Gichanga entiende de primera mano los retos que viven los pequeños productores, ya que sus padres también lo son. Creció viendo la inestabilidad económica que trae esa vida, pero también la frustración de saber que el trabajo de su familia y otros agricultores es súper importante para el sistema alimentario, aunque sea muy incierto.
“Soy hija de agricultores. De niña, vi temporadas buenas donde la cosecha era abundante y otras donde todo era más complicado,” le contó Gichanga a Global Citizen. “Siempre había problemas: plagas y enfermedades nuevas que nadie sabía cómo manejar. De hecho, hubo una vez que mi papá tuvo que pedir un préstamo para pagar mi escuela y lo terminaron embargando porque ese año la cosecha falló.”
Después continuó: “Por eso para mí todo esto es personal. La persistencia con la que mis papás consiguieron que yo estudiara es lo que me impulsa a seguir, porque sé que hay muchísimos chicos como yo, hijos de agricultores, que no saben si tendrán dinero para la escuela el próximo año, si podrán acceder a salud, porque sus papás dependen de un clima impredecible. Ellos no entienden a fondo los cambios que está viviendo la agricultura, pero el campo es lo único que les da de comer.”
Cuando ella misma decidió dedicarse a la agricultura, siguiendo a sus papás, al principio ellos no entendían muy bien su decisión. Pero rápido cambiaron de opinión y, hoy, son sus mayores admiradores.
Maryanne Gichanga, CEO y cofundadora de AgriTech Analytics, conversa con un pequeño agricultor en Kenia. Gichanga también ganó el Waislitz Disruptor Award de Global Citizen 2025.
Un equipo para acabar con el hambre
AgriTech Analytics tiene un equipo súper dedicado, con 15 empleados fijos y muchísimos colaboradores, todos trabajando para cubrir las necesidades de los agricultores. Gichanga señala que hay investigadores, ingenieros, agrónomos, mercadólogos, vendedores, atención al cliente y líderes comunitarios entre quienes conforman el equipo de AgriTech Analytics — un equipo que no solo ofrece soluciones, sino que está a su lado en cada paso del camino para ponerlas en práctica en su día a día. Para este equipo, ella tiene un mensaje:
“Quiero animarles a que sigan haciendo todo lo que hacen. De verdad están generando un impacto y no están perdiendo el tiempo — están construyendo para resolver la pobreza en el mundo.”
Agregó: “Los problemas que están resolviendo no solo afectan a las personas en África, sino en todo el mundo. Incluso podríamos expandirnos a nivel global, y eso nos anima muchísimo. Sé que trabajan muy duro y me siento tan orgullosa de ellas y ellos, podemos lograrlo. De verdad, el cielo es el límite. Así que seguimos mejorando, seguimos creciendo, y seguimos llegando a la mayor cantidad de agricultores posible porque esa es nuestra misión.”
Los pequeños agricultores alimentan al mundo y son clave para acabar con el hambre, pero siguen siendo de los miembros más vulnerables de la sociedad. A través de AgriTech Analytics, su trabajo se fortalece y se les brindan los recursos necesarios para que sus campos y comunidades prosperen; sin duda, un logro totalmente merecedor del Global Citizen Waislitz Disruptor Award.