Por Ellen Wulfhorst

Traducción: Erica Sánchez

NACIONES UNIDAS, 9 de diciembre (Fundación Thomson Reuters) - Una nueva generación de desigualdades mundiales impulsadas por el cambio climático y la tecnología podría desencadenar una ola de violencia e inestabilidad política si no se controla, advirtieron recientemente las Naciones Unidas.

El cambio climático y la tecnología, en lugar de riqueza e ingresos, están dividiendo cada vez más a los que tienen de los que no tienen, dijo en un reciente informe el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) sobre Desarrollo Humano 2019.

Estas formas de desigualdad están aumentando a medida que se avanza en otros modos más tradicionales de desigualdad, como la pobreza extrema y las enfermedades, dicen.

"Bajo la sombra de la crisis climática y el cambio tecnológico radical, las desigualdades en el desarrollo humano están tomando nuevas formas", dijo el informe.

"La crisis climática ya está golpeando a los más pobres, mientras que los avances tecnológicos como el aprendizaje automático y la inteligencia artificial pueden dejar atrás a grupos enteros de personas, incluso países".

Permitir que estas nuevas desigualdades crezcan podría ser "extremadamente peligroso y altamente volátil", dijo el administrador del PNUD, Achim Steiner.

"En los países ricos y emergentes y también en los países en desarrollo donde ha surgido una clase media, sus reacciones son cada vez más violentas", le dijo a la Fundación Thomson Reuters antes de la publicación del informe.

"Si no se maneja bien se manifestará esencialmente en lo que vemos en las noticias de la noche: automóviles y edificios en llamas, infraestructura en peligro, millones de personas en las calles protestando y derrocando gobiernos".

Las recientes protestas callejeras ocupan un lugar central en las noticias de los últimos tiempos, en Hong Kong, Irak, Irán, Líbano, Chile, Bolivia, Venezuela y otros lugares por una variedad de temas que incluyen el aumento de precios, las políticas gubernamentales, la corrupción y los movimientos prodemocráticos.

El informe del PNUD dice que el cambio climático alimentará la desigualdad cuando afecte a los países en desarrollo, muchos con capacidad limitada para resistir las amenazas de la desnutrición, las enfermedades y el estrés por calor.

"Entonces, los efectos del cambio climático profundizarán las fallas sociales y económicas existentes", dijo.

En cuanto al efecto de la tecnología en la desigualdad, el informe dice que la proporción de adultos con educación universitaria creció seis veces más rápido en los países altamente desarrollados que en los países menos desarrollados.

También dijo que las suscripciones de banda ancha fija crecieron 15 veces más rápido en los países desarrollados.

"Estas son las desigualdades que probablemente determinarán la capacidad de las personas para funcionar en una economía del conocimiento", dijo.

Los cambios se producen cuando muchas más personas ya no viven en la pobreza extrema, dijo Steiner.

"Nuestras aspiraciones han cambiado", dijo. "La gente no solo está mirando los dólares en su cuenta. Están buscando oportunidades, movilidad social y libertad de elección".

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