Las aguas residuales no suelen considerarse un recurso valioso, pero un equipo de investigadores con sede en España está demostrando lo valiosas que podrían ser en realidad.
Los científicos desarrollaron recientemente una forma de convertir las aguas residuales en energía limpia utilizando un tipo de bacteria púrpura, según informó recientemente un nuevo estudio publicado en la revista Frontiers in Energy Research.
Las aguas residuales industriales y domésticas contienen sustancias orgánicas y nutrientes, que son claves para la producción de energía. Las bacterias fototróficas púrpuras tienen la capacidad única de recuperar energía de tales desechos orgánicos. Al igual que las hojas, las bacterias también capturan la energía del sol a través de pigmentos fotosintéticos.
Los científicos realizaron experimentos para acelerar y manipular el metabolismo de las bacterias para generar la mayor energía posible y encontraron que cuando se les suministra una corriente eléctrica, las bacterias pueden extraer el 100% de carbono de cualquier tipo de residuo orgánico, convirtiéndolo en gas de hidrógeno que puede ser utilizado para combustible.
Las bacterias no solo pueden absorber los gases de efecto invernadero, sino que también pueden transformar las aguas residuales en una fuente de energía sostenible. Y aprovechar su poder podría ser un cambio a futuro para la gestión de aguas residuales.
Si bien el potencial energético de las aguas residuales ha sido descontado, también lo ha hecho su impacto en el medio ambiente. Las plantas de tratamiento de aguas residuales son responsables de aproximadamente el 3% de los gases de efecto invernadero, según un estudio publicado en 2016.
“Uno de los problemas más importantes de las actuales plantas de tratamiento de aguas residuales son las altas emisiones de carbono”, dijo el Dr. Daniel Puyol, coautor del informe, a través de un comunicado de prensa.
“Nuestro proceso de biorrefinería basado en la luz podría proporcionar un medio para recolectar energía verde de las aguas residuales, con una huella de carbono cero”, dijo.
A medida que los países trabajan para hacer cumplir el acuerdo de París y reducir sus emisiones de combustibles fósiles, la gestión de las aguas residuales es un área clave para la innovación. La industria de las aguas residuales, que actualmente es un consumidor de energía, pronto podría pasar a ser un importante proveedor de energía.