A medida que nuestro planeta se calienta, también lo hace la presión sobre nuestros sistemas alimentarios. El cambio climático no es solo una amenaza futura, ya está afectando lo que comemos, cómo se cultiva y quién tiene acceso a ello.
Con la población mundial proyectada a alcanzar 9.7 mil millones para 2050, necesitaremos alimentar a casi 2 mil millones de personas más, incluso mientras las tierras de cultivo se reducen y las condiciones de cultivo se vuelven más impredecibles.
El clima extremo, las temperaturas crecientes y las estaciones cambiantes están reduciendo tanto la calidad como la cantidad de alimentos, especialmente en países ya vulnerables al hambre y la inseguridad alimentaria. Debemos actuar ahora para construir sistemas alimentarios más resilientes que trabajen con la naturaleza, no en su contra.
Por eso estamos pidiendo a los líderes mundiales que inviertan en agricultura sostenible y soluciones inteligentes para el clima que reduzcan la dependencia de las importaciones de alimentos, impulsen las economías locales y aseguren alimentos nutritivos para todos.
Añade tu nombre a esta carta abierta que entregaremos a los responsables de las decisiones como parte de nuestra campaña.