El acceso a la energía es uno de los mayores obstáculos para poner fin a la pobreza extrema. Sin energía confiable, los niños no pueden estudiar en la noche, los hospitales tienen dificultades para brindar atención, y los negocios no pueden crecer. En África, cientos de millones de personas todavía están excluidas de estas oportunidades simplemente porque no tienen electricidad.
La energía renovable es la clave para cambiar esto. Los proyectos solares y eólicos se pueden implementar rápidamente, llegan a las comunidades rurales y ofrecen energía accesible y sostenible para las futuras generaciones. Ayudando a ampliar estas soluciones, las empresas pueden tener un papel transformador al llevar energía a hogares, escuelas y centros de salud en todo el continente.
La campaña “Scaling Up Renewables in Africa” está llamando a que la energía limpia llegue a un millón de hogares. Con las empresas sumándose junto a gobiernos y filántropos, podemos impulsar el progreso hacia un futuro más justo y sostenible.