En todo el mundo, los desastres climáticos golpean con mayor fuerza y frecuencia, destruyendo hogares, medios de vida y vidas. Sin embargo, los países y comunidades más afectados son aquellos que menos hicieron para causar esta crisis. Mientras tanto, los mayores contaminadores y los ultra ricos continúan obteniendo beneficios sin pagar por el daño.
En junio, los líderes mundiales se reunirán en Sevilla para la Cuarta Cumbre de Financiamiento para el Desarrollo (FFD4). Es un momento crucial para impulsar soluciones audaces, como impuestos internacionales a las industrias más ricas y contaminantes. Pequeños gravámenes sobre las ganancias de los combustibles fósiles, las transacciones financieras o los aviones privados podrían recaudar cientos de miles de millones para apoyar a los más afectados por el cambio climático.
Esto es una cuestión de justicia. Actualmente, los países vulnerables al clíma se ven obligados a endeudarse para sobrevivir a desastres que no crearon. Es hora de que los mayores ganadores contribuyan a solucionar una crisis que ellos han alimentado. Los impuestos justos garantizarían que los contaminadores paguen y las comunidades de primera línea obtengan el apoyo que necesitan.
En la FFD4, los gobiernos deben elegir: proteger a los contaminadores o financiar la justicia climática. Agrega tu voz para exigir una acción real y ayudar a construir un futuro más justo y sostenible para todos.